Entre las muchas diferencias que se suelen citar como fundamentales para conservar una división entre responsabilidad contractual y responsabilidad extra contractual, la que se refiere a la culpa y a la posibilidad de tomar en cuenta su graduación adquiere una relevancia especial, no sólo por estar al origen del problema, sino también porque su superación allana el camino para la unificación de los dos regímenes.