Tres décadas de la apuesta por la nación pluriétnica y multicultural. La consulta previa - un dudoso presente y un complicado futuro
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Resumen en español
El reconocimiento de la Nación pluriétnica y multicultural que hace la Constitución de 1991 es una de las promesas de transformación social de la Carta. La Consulta Previa, abanderada por la Corte Constitucional ha sido la herramienta utilizada para incluir a las comunidades étnicas al proyecto de nación y así cumplir esta promesa. No obstante, su desarrollo, de la mano del derecho transformador, está lejos de ser pacífico, pues adversarios y defensores debaten acaloradamente. Los primeros, denuncian la inseguridad jurídica que viven, los segundos, defienden los avances logrados y piden mayor efectividad. El prestigio adquirido por la Consulta Previa hace perder de vista que los debates que se dan alrededor de esta son apenas el reflejo de la tensión social que, a 31 años de expedida la Carta, no solo persisten, sino que se profundizan en torno a la apropiación y explotación de la tierra y que dejan de presente los conflictos entre comunidades étnicas, inversionistas y el mismo Estado.
Resumen en ingles
The recognition of the multi-ethnic and multicultural Nation by the 1991 Constitution is one of the Charter's promises of social transformation. Prior Consultation, championed by the Constitutional Court, has been the tool used to include ethnic communities in the national project and thus fulfill this promise. However, its development, hand in hand with the transforming law, is far from being peaceful, adversaries and defenders debate heatedly: the former denounce the legal insecurity they experience, and the latter defend the progress achieved and ask for greater effectiveness. The prestige acquired by the Prior Consultation makes us lose sight of the fact that the debates surrounding it are merely a reflection of the social tension that 31 years after the Charter was issued not only persists, but also deepens around the appropriation and exploitation of land, and that the conflicts between ethnic communities, investors and the State itself are still present.